Disfrutaremos todo un día de la actividad de descenso de cañones en un entorno inmejorable, en la cuenca del río Jucar. Recorreremos el cañon conocido como "Ventano del diablo" por el rio Jucar atraves de su curso, donde realizaremos saltos de diferente altura, nos deslizaremos por toboganes acuaticos, atravesaremos cascadas, cuevas y nadaremos de punto a punto, o simplemente andaremos por el curso del rio.
El Ventano del Diablo esta ubicado en la localidad de Villalba de la Sierra, pertenece al Rio Jucar. Se trata de un barranco sencillo, acuático e ideal para familias, pequeños y personas que quieran experimentar por primera vez el barranquismo acuatico. Tiene multitud de saltos de poca dificultad técnica con lo que hacen de éste un descenso fácil. Es uno de los lugares mas bonitos y salvajes de la Sierra de Cuenca, nos bañaremos, nadaremos en sus pozas y badinas de agua cristalina.
Este barranco no cuenta con ningún paso de dificultad técnica que requiera cuerdas, solamente tiene saltos y toboganes, siendo todos evitables en caso de que alguna persona no quiera realizarlos. Es el descenso más acuático de todos los que puedas realizar por esta zona, lo que lo convierte en la actividad perfecta para en los meses de verano. En el barranco del ventano aprenderás a disfrutar de esta gran actividad en uno de los sitios más bellos y famosos de la serranía de Cuenca.
El barranco lleva agua todo el año y con muy buen caudal, gracias a realizarse en uno de los ríos más importantes de la zona y se puede realizar a partir de los 12 años, siempre que se sepa nadar y no se tenga vertigo excesivo.
A 30km de Cuenca, en dirección a la Ciudad Encantada, podemos encontrar el Ventano del Diablo, un mirador de formación rocosa y natural dentro del municipio de Villalba de la Sierra. Desde el Ventano del Diablo hay unas increibles vistas, principalmente de la hoz del Jucar y toda la naturaleza por la que comúnmente se caracteriza la Sierra de Cuenca. Para los amantes de los deportes de riesgo y los más intrepidos, se puede practicar descenso de cañones por sus toboganes, cascadas y saltos.
Cuentan historias de brujas y conjuros sobre este lugar cuyas vistas son unas de las más impresionantes de la Sierra de Cuenca y se ha convertido en parada cómoda y casi obligatoria para todo el que se adentra en la Serranía.
El río Júcar esculpe aquí un profundo cañón por el que serpentea el agua del río, con conocidos parajes como los Cortados del Júcar, una sucesión de piscinas
"Una experiencia fenomenal que recomendaría a cualquiera. El equipo es muy amigable espero verlos otra vez pronto"
"Estuvimos un grupo celebrando un cumpleaños, entre ellos niños y nos hicieron una gymkana, fue estupendo y los niños pudieron participar con nosotros en todas las pruenbas y los monitores estupendos, repetiremos ."
A 30km de Cuenca, en dirección a la Ciudad Encantada, podemos encontrar el Ventano del Diablo, un mirador de formación rocosa y natural dentro del municipio de Villalba de la Sierra. Desde el Ventano del Diablo hay unas increibles vistas, principalmente de la hoz del Jucar y toda la naturaleza por la que comúnmente se caracteriza la Sierra de Cuenca. Para los amantes de los deportes de riesgo y los más intrepidos, se puede practicar descenso de cañones por sus toboganes, cascadas y saltos.
Cuentan historias de brujas y conjuros sobre este lugar cuyas vistas son unas de las más impresionantes de la Sierra de Cuenca y se ha convertido en parada cómoda y casi obligatoria para todo el que se adentra en la Serranía.
El río Júcar esculpe aquí un profundo cañón por el que serpentea el agua del río, con conocidos parajes como los Cortados del Júcar, una sucesión de piscinas naturales de aguas azules y estrechos desfiladeros con aguas bravas. Sus aguas puras ofrecen uno de los escasos refugios de la península para el martín pescador y la nutria.
El paraje natural desafía a senderistas, escaladores y barranquistas y es también una estupenda atalaya para los aficionados a la ornitología, ofreciendo la posibilidad de observar tanto pequeñas avecillas de bosque, como grandes rapaces o carroñeros.
naturales de aguas azules y estrechos desfiladeros con aguas bravas. Sus aguas puras ofrecen uno de los escasos refugios de la península para el martín pescador y la nutria.
El paraje natural desafía a senderistas, escaladores y barranquistas y es también una estupenda atalaya para los aficionados a la ornitología, ofreciendo la posibilidad de observar tanto pequeñas avecillas de bosque, como grandes rapaces o carroñeros.
Qué incluye la actividad:
No Incluye:
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Material necesario:
Duración actividad:
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